Trump dice que EE.UU. «debe condenar» el racismo y supremacismo blanco
Donald Trump habló sobre el reciente tiroteo de El Paso (Texas), donde el presunto autor publicó un manifiesto contra los inmigrantes y los hispanos. El presidente exigió la pena de muerte «sin retrasos» para los autores de matanzas.
Washington. El presidente estadounidense, Donald Trump, urgió este lunes al país a condenar con «una sola voz el racismo, el fanatismo y el supremacismo blanco» al comentar el reciente tiroteo de El Paso (Texas), antes del cual el presunto autor publicó un manifiesto contra los inmigrantes y los hispanos.
«El atacante de El Paso publicó un manifiesto en Internet consumido por el odio racista», dijo Trump en un discurso televisado a la nación desde la Casa Blanca.
«Y (con) una voz, nuestra nación debe condenar el racismo, el fanatismo y la supremacía blanca. Estas ideologías siniestras deben ser derrotadas. El odio no tiene lugar en Estados Unidos. El odio deforma la mente, devasta el corazón y devora el alma», añadió.
El presidente estadounidense también se mostró «indignado y asqueado» por la matanza de Ohio, y aseguró que los condenados por crímenes de odio deberían encarar ejecuciones «rápidas».
El mandatario exigió la «pena de muerte» para los autores de tiroteos indiscriminados sin retrasos.
«Hoy también mando al Departamento de Justicia que proponga una legislación que garantice que quienes cometen crímenes de odio y asesinatos en masa se enfrenten a la pena de muerte y que esta pena capital se aplique de forma rápida, decisiva y sin años de retraso innecesario», dijo.
Trump prefirió denunciar «la glorificación de la violencia», afirmando que Internet ha radicalizado las «mentes perturbadas», antes que referirse a la disponibilidad inmediata de armas de fuego como el principal problema detrás de la epidemia de violencia armada en Estados Unidos.
«Debemos reconocer que Internet ha proporcionado una vía peligrosa para radicalizar las mentes perturbadas y realizar actos dementes», dijo Trump, mencionando además los «horripilantes y espeluznantes videojuegos que ahora son comunes».
El presidente no dijo nada en su discurso con respecto a restringir el acceso en Estados Unidos al tipo de armas poderosas que se usan habitualmente en los tiroteos masivos cada vez más frecuentes.
Antes de su mensaje televisado, había tuiteado que debería considerarse una mayor verificación de antecedentes en el momento de la compra de armas y sugirió que cualquier reforma de la ley de armas debería estar vinculada a los cambios en las leyes de inmigración.
Nada de esto dijo al dirigirse a la ciudadanía, sino que puso el foco en las enfermedades mentales.
«Debemos reformar nuestras leyes de salud mental para identificar mejor a las personas con trastornos mentales que pueden cometer actos de violencia y asegurarnos de que esas personas no solo reciban tratamiento, sino cuando sea necesario, confinamiento involuntario», afirmó en su alocución.
«La enfermedad mental y el odio aprietan el gatillo, no las armas», opinó.
Fuente: EFE / AFP